Novedad editorial
Siete historias lógicas y un cuento breve
Cuando repaso la vida que he llevado, me parece
que es natural que procediera así; y seguramente si tuviera que volver a
empezar lo haría del mismo modo. No parece que hubiera otra posibilidad. Las
dos únicas veces en que escribí largo tuve que suspender la actividad
militante. Fue cuando redacté mi tesis doctoral [Las ideas gnoseológicas de
Heidegger] y cuando escribí el manual de lógica. Dos veces quedó claro que
era imposible escribir un texto largo y llevar a cabo diariamente trabajo
conspirativo. Y ganarme la vida, además. Creo que veo claramente las
limitaciones de lo que he escrito, que siempre ha sido con urgencia.
Manuel Sacristán (1983)
Te doy la enhorabuena, pues, y me la doy a mí
mismo, pues tus noticias [la publicación de Introducción a la lógica y al
análisis formal] aportan un elemento animador a mi visión del
futuro de España –uno de los pocos- y constituyen un estimulante, hasta cierto
punto inesperado. Tengo interés en conocer más detalles de ese panorama
entrevisto.
Miguel Sánchez-Mazas (1965)
Scholz -la imagen le sería grata, dado el
platonismo que profesaba- no era hombre para salir de la caverna como del lugar
despreciable al que jamás se vuelve; siempre estaba de vuelta en ella para
tratar con sus moradores. Éste es acaso el sentido de la actividad periodística
y divulgadora de los últimos años de su vida, durante los cuales relajó su
contacto con la creciente complicación técnica de la lógica simbólica. Obra
viva y obra escrita se integran en esta admirable figura. Scholz empezó su
carrera intelectual en el terreno de la Teología. Interesado a poco por temas
filosóficos generales, su personalidad docente se afirma ya dentro de la
Filosofía (profesor de Filosofía en Münster desde 1928); cuando, por último, se
dedica especialmente a la lógica formal, Scholz no deja nunca de ser un
filósofo, asumiendo además la responsabilidad moral que él consideraba aneja a
ese título; y ello a veces hasta extremos arriesgados como en las líneas
antepuestas en 1941 a Metaphysik als strenge Wissenschaft, en un momento
en que al recrudecerse, como consecuencia de la guerra, la tiranía a que se
hallaba sometido su país, hasta los científicos de más viva sensibilidad moral
renunciaban a todo intento de oposición.
Manuel Sacristán (1957)
En todo caso y al margen de nuestros pensamientos
contra-fácticos y desiderativos, la sabiduría, el rigor y la lucidez
filosóficas de Sacristán siempre podrán representar tanto una demostración
práctica, como un modelo, para todos lo que se vean llevados a hacerse cargo de
los problemas de la situación actual de la lógica en Filosofía y afrontar sus
nuevos desafíos sean analíticos y teóricos, digamos internos, o sean académicos
y profesionales, digamos interdisciplinarios y externos. Para nosotros mismos,
sin ir más lejos. Pero, en fin, creo que la lección más cierta y duradera de
esta consideración en torno a lo que Sacristán podría haber hecho si le
hubieran dejado consiste, justamente, en evitar la ocasión de este tipo de
consideraciones y de contra-fácticos: en la obligación de preservar el ethos
académico y los valores cognitivos, y en el compromiso de velar por la calidad
del discurso público y por la dignidad de la lógica civil, frente al imperio de
las consignas, los credos, la intimidación del contrario o su reducción al
silencio.
Luis Vega Reñón (2005)
ÍNDICE
PRÓLOGO. LUIS VEGA REÑÓN
PRESENTACIÓN. UN MARXISTA Y GERMANISTA,
REPRESALIADO POR EL FASCISMO, AL QUE NUNCA AVERGONZÓ SU INCORREGIBLE ADICCIÓN A
LA LÓGICA
1. DESDE UN PUNTO DE VISTA TARSKIANO. NOTAS SOBRE
LA CORRESPONDENCIA ENTRE JOSEP FERRATER MORA Y MANUEL SACRISTÁN
1.1. EL ESQUEMA DE UNA CONFERENCIA NO IMPARTIDA
1.2. APUNTES SOBRE LA OPOSICIÓN A LA CÁTEDRA DE
LÓGICA DE 1962
2. DESDE UN PUNTO DE VISTA LEIBNIZIANO. CARTAS Y
TELEGRAMAS ENTRE DOS LÓGICOS ANTIFRANQUISTAS
2.1. MANIFIESTOS ESTUDIANTILES
2.2. LA ARITMÉTICA DE LAS IDEAS DE MANUEL
SÁNCHEZ-MAZAS
2.3. IDEAS PRELIMINARES RESPECTO A LAS
POSIBILIDADES DE UN CÁLCULO ARITMÉTICO DE CUALIDADES
3. DESDE EL PUNTO DE VISTA DEL RIGOR, LA CRÍTICA
Y LA AMISTAD. ANOTACIONES Y SUGERENCIAS DE VÍCTOR SÁNCHEZ DE ZAVALA SOBRE
INTRODUCCIÓN A LA LÓGICA Y AL ANÁLISIS FORMAL
3.1. LA PRESENTACIÓN DE UN POETA
3.2. FUNDAMENTOS DE LA FILOSOFÍA
4. DESDE EL PUNTO DE VISTA DE LA LÓGICA NO
STÁNDAR. UNA INVITACIÓN REITERADA DE LUDOVICO GEYMONAT.
4.1. OBSERVACIONES SOBRE LÓGICA
COMBINATORIA
5. DESDE ABAJO. VISITAS A LOS TALLERES DE
TRABAJADORES DE IMPRENTA
5.1. SOBRE PRÓLOGOS QUINEANOS 6. DESDE UN
FILOSOFAR DOCUMENTADO Y FRUCTÍFERO. UNA CONJETURA DE FRANCISCO FERNÁNDEZ BUEY
SOBRE EL PAPEL DE LA LÓGICA EN LA APROXIMACIÓN DE SACRISTÁN A LA GNOSEOLOGÍA DE
HEIDEGGER EN SU TESIS DOCTORAL
6. LAS IDEAS GNOSEOLÓGICAS DE MANUEL SACRISTÁN
7. DESDE LA POESÍA Y LA SOLIDARIDAD. DEL AUTOR DE
LA PELL DE BRAU AL TRADUCTOR DE JOAN BROSSA Y AUSIÀS MARC.
7.1. TESTIMONIO DE UNA EXPULSIÓN
UNIVERSITARIA
7.2. BREVE APROXIMACIÓN BIOGRÁFICA. RESPUESTA DEL
ARCHIVO ESPRIU .
8. Y EL CUENTO BREVE. DESDE LA PERSPECTIVA DE UN
LÓGICO REPUBLICANO EXILIADO, JUAN DAVID GARCÍA BACCA
A MANERA DE EPÍLOGO. VÍCTOR SÁNCHEZ DE ZAVALA,
"EN MEMORIA DE MANUEL SACRISTÁN
BIBLIOGRAFÍA
ÍNDICE NOMINAL Y ANALÍTICO
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Prólogo de Siete historias lógicas y un cuento
breve
Como bien saben todos los interesados en la obra de
Manuel Sacristán, Salvador López Arnal es por dedicación, casi se diría por
destino, uno de sus albaceas más sólidos y acreditados. Salvador cuenta en su
haber con numerosas ediciones -más de una decena- de textos de Sacristán de
diverso género (anotaciones manuscritas, apuntes de clase, conferencias,
entrevistas, correspondencia, etc.), todas ellas con textos y materiales
inéditos. Uno de sus trabajos editoriales puede considerarse precedente de la
recopilación presente. Se trata de "Amables cartas lógicas", incluido
en Salvador López Arnal y otros, eds., Donde no habita el olvido
(Barcelona: Montesinos, 2005), pp. 161-191, un libro concebido en recuerdo y
celebración del 40º aniversario de la publicación de la Introducción a la
Lógica y al análisis formal de Sacristán (1964). "Amables cartas
lógicas" reunía la correspondencia mantenida por Sacristán, a propósito de
la aparición de su conocido y reconocido manual, con José Ferrater Mora, Miguel
Sánchez Mazas y Víctor Sánchez de Zavala. Desde entonces, Salvador ha extendido
este género de la interrelación de Sacristán, más allá de sus comienzos
epistolares, a personalidades de nuestra cultura filosófica tan dispares y
relevantes como Lukàcs (Sacristán y la obra político-filosófica de György
Lukàcs, Madrid: La Oveja Roja/FIM, 2012) y Quine (Manuel Sacristán y la
obra del lógico y filósofo norteamericano Willard van Orman Quine, Málaga:
Ediciones del Geral, 2015). El presente libro es la culminación natural de esta
línea de investigación y recuperación de Sacristán a través de su
emparejamiento y comunicación con sus contemporáneos. Según esto, las historias
lógicas de Salvador podrían recordar hasta cierto punto las vidas paralelas de
Plutarco, pero esta referencia induciría a engaño: las historias de Salvador no
son historias paralelas sino convividas y entrecruzadas. El propio autor
dialoga por su cuenta con otros próximos, como Francisco Fernández Buey, a
veces de forma expresa, a veces de forma tácita. En todo caso, hay una
saludable impresión a la que nadie que lea este libro podrá sustraerse: la
lógica no es un vicio solitario.
La compilación presente de historias por
correspondencia añade a las cartas de los autores antes convocados las también
amables del filósofo e historiador de la ciencia italiano, Ludovico Geymonat.
Pero no deja de haber nuevas comparerencias. Una es la de un invitado, el gran
Salvador Espriu, que podría considerarse inesperado en este contexto de no
mediar alguna penosa experiencia de la vida de Sacristán sentida por sus
amigos, como su expulsión de la universidad por el procedimiento de la no
renovación del contrato o el fallecimiento de Giulia Adinolfi por no traer a
colación el acontecimiento más sonado en medios académicos, su fallida
oposición a la cátedra de Lógica de la universidad de Valencia. Otra es la
figura multiforme del maestro que ya permitía a Sacristán contraponer el
maestro de imprenta al maestro universitario del puro Pensar, y ahora da pie a
Salvador para evocar la calidad de Sacristán como maestro "socrático"
y sugerir un nuevo emparejamiento con el Juan de Mairena machadiano. Una
tercera comparecencia es la de Heidegger por mor de la tesis doctoral de
Sacristán sobre las ideas gnoseológicas de Heidegger, y su actitud
crecientemente crítica ante esta dimensión del pensamiento heideggeriano, desde
su primera aproximación en 1953 hasta sus postreras reflexiones de 1981 en
Guanajuato, pasando por la tesis de 1959. Desde el punto de vista de la
consistencia intelectual de Sacristán en sus años de intensa dedicación a la
lógica, tiene importancia reconstruir el sentido de esta suerte de
"digresión" académica heideggeriana, representada por su doctorado.
El presente libro tiene, en fin, el colofón de un cuento breve en el que
aparece otro nuevo convidado, quizás más presentido que presente en las
relaciones de Sacristán, Juan David García Bacca. Aunque, manteniéndose fiel a
sus inclinaciones editoriales, Salvador aún nos reserva el regalo añadido de un
detallado comentario a un nuevo texto inédito sacristaniano.
Las siete historias, más el cuento añadido, se
desenvuelven en sendos capítulos autocontenidos. La escritura de Salvador es
viva y directa, y gusta demorarse en los detalles contextuales para situar el
momento vital e intelectual del propio Sacristán y mostrar el sentido de su
relación con sus corresponsales. No es extraño que en ocasiones se reiteren
algunas referencias de especial significación o repercusión. La repetición no
siempre es mala; no lo es en absoluto cuando se trata de circunstancias y
opresiones que conviene recordar para no volverlas a vivir. Este es un legado
de Sacristán que viene a recordarnos el final, entre desiderativo e imperativo,
de la nota necrológica: "En memoria de Manuel Sacristán" de V. Sánchez
de Zavala (1985), nota que justamente constituye el epílogo de la presente
compilación: «hacer permanentemente imposible que las discrepancias de ideas,
de valoraciones, de perspectiva de las cosas que nos puedan separar de una
persona de valía demostrada, cualesquiera que sean, nos lleven jamás, caso de
tener entre las manos algún poder de decisión pública, a vetarle el paso. Esto
es lo que se hizo con él reiteradamente; que a todos nos sea ya invencible la
repugnancia si ocasión llegase a hacer nada parecido».
La compilación de Salvador no es un mero trabajo de
erudición y rescate editorial, convencionalmente académico, aunque no deje de
ser riguroso y excelente en este sentido. Tiene el valor del testimonio que
declara el desgarro personal de Sacristán entre la "adicción lógica"
por un lado y, por el otro, las gestiones y responsabilidades prácticas y, como
diría Pablo Ródenas, poliéticas. Según es bien sabido, la afición de Sacristán
a la lógica como disciplina formal es un caso un tanto curioso: sigue, desde su
franco nacimiento en los años 50, una especie de curso Guadiana con
reapariciones cada vez más esporádicas aunque persistentes hasta los 80. Y el
propio Sacristán, si bien no se ahorra observaciones y confesiones sobre las
vicisitudes de su dedicación a la lógica, tiende a hacerlas más descriptivas
que explicativas. Lo que Salvador nos ofrece a este respecto son múltiples
referencias contextuales que, en conjunto, trazan un cuadro impresionista de la
circunstancia nacional-católico-escolástica en que se vio asfixiada la
posibilidad de la dedicación y la investigación lógicas de Sacristán, aunque no
pudiera con sus arraigados hábitos de precisión conceptual, rigor metodológico
y fino sentido lógico. Salvador no reconstruye un cuadro sistemático, ni hace
una historia lineal: como antes decía, su trabajo no es un ejercicio meramente
académico, erudito. Tiene intereses y compromisos más directos y vivos, y a
ellos responde la composición del libro. Se trata de una floración por rizomas:
siete historias centrales que luego, cada una de ellas por su cuenta, crecen
germinando en otras historias, a veces incidentales, pero no menos
determinantes e instructivas.
Así esta composición rizomática da a la compilación
de Salvador el inestimable valor de un documental histórico sobre los empeños
intelectuales y las lacras culturales e intelectuales de la época franquista,
el valor de un No-Do subversivo en el que unas pocas palabras valen miles de
imágenes de frustraciones y miserias. De este modo el testimonio de unas
peripecias vitales deviene en testimonio de época. Saltan a la vista las
dificultades de una aculturación y una modernización del país en los estudios
de Lógica formal, la imposibilidad de formar un "colegio invisible"
en este campo a pesar de los contactos epistolares entre los pioneros
interesados y, en suma, las limitaciones del conocimiento público en esta área.
No dejan de ser sintomáticos en este sentido el inopinado relieve que cobra la
lógica combinatoria como avanzadilla de la investigación formalizada no
estándar o, al menos, no escolar, o el reproche de que la Introducción a la
Lógica y al análisis formal parece prestar recordemos, a mediados de los 60
menor atención a la presentación axiomática de la Lógica que a su presentación
como sistema de deducción natural. Mientras tanto, en los estudios lógicos en
la España de entonces brillan por su ausencia la madurez semántica de la teoría
de modelos, el crecimiento de la teoría de la computabilidad o los desarrollos
alternativos, fueran complementarios o se pretendieran divergentes, de las
lógicas no estándar con la salvedad en este caso de las incursiones
intensionales de M. Sánchez Mazas.
Este precioso secreter de historias, cartas y
retazos de relaciones personales que ha labrado Salvador, con el rigor y la
sabiduría del maestro artesano, puede ayudar a la lectora y al lector del libro
no solo a comprender, sino a sentir y compartir, la fuerza, la frustración y el
desgarro de la adicción a la Lógica de un Manuel Sacristán al que le tocaron,
como habría dicho Jorge Luis Borges, "malos tiempos que vivir".
Rebelión ha publicado este artículo con el permiso del
autor mediante una licencia de Creative Commons,
respetando su libertad para publicarlo en otras fuentes.
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